Hipertensión

La hipertensión es la elevación de los niveles de presión arterial de forma continua o sostenida. Es el término empleado para describir la presión arterial alta.

  • La presión arterial normal es cuando mide, la mayoría de las veces, menos de 120/80 mmHg.
  • La presión arterial alta (hipertensión) es cuando la presión arterial es, la mayoría de las veces, de 140/90 mmHg o superior.

Es uno de los problemas de salud más estudiadas en el mundo. Ha sido denominada la plaga silenciosa del siglo XXI, ya que a veces nos percatamos de su existencia cuando ya es demasiado tarde.

La hipertensión es fácil de detectar; sin embargo, cursa con complicaciones graves y letales si no se trata a tiempo. Como aseguran los expertos, la hipertensión crónica es el factor de riesgo modificable más importante para desarrollar enfermedades cardiovasculares, así como para la enfermedad cerebrovascular y renal.

En el siglo VI a.C., en una de las obras indias más importantes de la medicina antigua Ayurveda llamada Sushruta, se mencionan por primera vez los síntomas que podrían ser coherentes con la hipertensión. En esa época se trataba la «enfermedad del pulso duro» mediante la reducción de la cantidad de sangre por el corte de las venas o la aplicación de sanguijuelas. Personalidades reconocidas como el Emperador Amarillo (en China), Cornelio Celso, Galeno e Hipócrates abogaron por tales procedimientos.

La aplicación de sanguijuelas (Hirudoterapia*), un remedio natural de amplia utilización durante muchos siglos, ha demostrado su eficacia contra la presión arterial alta. Su efecto inmediato y su alto nivel de seguridad permiten considerarlas como una herramienta segura y eficaz para este problema.

La efectividad de la aplicación de sanguijuelas se debe, por un lado, al volumen de sangre ingerido y al sangrado posterior que tiene lugar una vez se desprende la sanguijuela del huésped, disminuyendo notablemente de este modo la congestión venosa.

Y por otro lado, se debe a la acción de las sustancias presentes en la saliva de sanguijuela, que reducen la coagulación de sangre, aumentando de este modo el flujo sanguíneo; disuelven los coágulos, proporcionando mejor circulación sanguínea, causando una reducción notable de la presión arterial.

Las principales ventajas de la técnica consisten en que no tiene efectos secundarios ni consecuencias negativas y tiene pocas contraindicaciones. Se trata de un procedimiento seguro e indoloro. Cada ejemplar de Hirudo medicinalis proviene de biofabrica, es de uso único y no puede ser reutilizado.

*Hirudoterapia es una técnica complementaria, no constituye una alternativa ni un sustituto a las indicaciones de su médico. Siga, en todo caso, sus indicaciones.